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Diario de viaje: Día 19, 20 y 21. El final.

Me desperté, era el gran día. Tenia por delante unos 80km de pavimento desde Villa La Angostura hasta Bariloche. Salí temprano para intentar cubrir la mayoría de la distancia por la mañana, que es cuando mas disfruto pedalear.

Cerro monjes
El camino resultó ser bastante tranquilo, aunque tenia varias subidas y bajadas que si bien no eran de pendiente muy pronunciada, eran un poquito largas. La mayoría del tiempo se podía ver el lago Nahuel Hapi a la derecha del camino ¡Mierda que es grande ese lago eh!

Cuando me faltaban todavía 35km para llegar, la vi. La ciudad de San Carlos de Bariloche estaba allí, del otro lado de aquel gigantesco lago. Me sentía eufórico, pero sabia que faltaban como mínimo un par de horas mas de pedaleo. Si las bicicletas anduvieran por el agua me ahorraría un buen rato.



Primera vista de Bariloche
Faltando ya 20km el camino se tornó bastante urbano, haciéndome pensar que ya estaba ahí nomas ¡Pero faltaban 20km! Y el camino era muy transitado, por lo que tenia que avanzar con mucho cuidado.

Hasta que por fin llegué. Todos los kilómetros, toda la aventura, todas las personas copadas que conocí en el camino, todo se resumió a ese momento en que vi el cartel "Bienvenidos a San Carlos de Bariloche". Lo había logrado, había superado el desafío, había cumplido mi sueño, había pedaleado 1226km y otros 185km a dedo en total desde la ciudad de Mendoza hasta Bariloche ¡Que felicidad!

Vista desde el hostel
Un amigo de La Plata que es de Bariloche me había recomendado un hostel (¡gracias Mago!), así que pedí indicaciones y tras pedalear un rato por la avenida principal, llegué al lugar de nombre "Patanuk". Me registré, pagué la habitación compartida, até la bicicleta en el patio trasero del lugar, desarmé las alforjas, guardé todo en el locker de la habitación, me bañe y me preparé un café. El lugar estaba bastante bueno y tenia una muy buena vista del lago, sin embargo, estar en un hostel era algo raro, nunca me había hospedado en uno y era una experiencia totalmente nueva para mi. No estaba muy seguro de qué se podía hacer o que se podía usar y qué no.

Salí un rato a pasear por el centro. El olor a dulce que salía de los negocios de chocolate, que no eran pocos, hacia que mis instintos mas primitivos salgan a flote. COMEEEEEEEEER. Definitivamente iba a comprar chocolates antes de irme, aunque no muchos porque ya tenia las monedas contadas.

Cuando volví al hostel, me puse a charlar con un muchacho que también había realizado viajes en bicicleta pero mas cortos. Hable durante un buen rato con Carlos sobre bicicletas, carreras, circuitos, lugares y de todo un poco. También me contó que el hacia alpinismo y me mostró algunas fotos de el escalando el cerro Fitz Roy. Increíble.

Bar del hostel
Ya en la noche, Carlos me ofreció ir al bar del hostel (si, el hostel tiene su propio bar) a tomar una cerveza. Acepté. Allí nos pusimos a hablar con un grupo de 2 chicas y 1 chico que eran estudiantes de intercambio de Estados Unidos. Durante un buen rato compartimos algunos aspectos de nuestras respectivas culturas y hablamos de todo un poco. Sobre todo nos reímos de lo difícil que era para una de las chicas pronunciar la "rr".

Al rato se acerca otra chica de Estados Unidos y nos ofrece un porro. No acepté. No tengo nada en contra de la mariguana pero sí contra el humo, y yo necesito mis pulmones sanos para seguir pedaleando por mucho tiempo mas. Después fuimos todos a la cocina del hostel para prepararnos la comida y llegó otro chico de Estados Unidos, tras hablar un rato nos ofrece porro. ¿Que onda loco? ¿Todo el mundo fuma porro acá? Terminé de comer y me fui a dormir. Extrañaba el ambiente de los campings.

Cerro Catedral
Me desperté temprano al otro día para aprovechar al máximo el desayuno gratis que ofrecía el hostel. Morfé como un animal. Al rato, me reuní con Carlos y lo acompañe al centro donde el alquiló una bicicleta. Durante algunas horas estuvimos pedaleando y conocimos la zona del Lago Gutierrez, lindo lugar. Cuando volvimos me recomendó visitar el cerro Otto, así que por la tardé iría allí. Volvimos al hostel y almorzamos.

Mas tarde fui al centro a comprar unos chocolates y regalos para la familia y amigos (y para mi también). Cuando volví al hostel, preparé la bici y salí para el cerro Otto. El cielo se había nublado bastante pero iría igual. Era mi ultimo día en Bariloche, tenia que aprovecharlo sea como sea.

En la cima del Cerro Otto
Mientras subía el cerro lentamente por aquellos 7km de constante subida en ripio pedregoso, la temperatura descendió y comenzó a correr un viento que hizo el ascenso un poco mas difícil  Luego de una hora llegué a la cima y me encontré con la confitería giratoria. Estaba cerrada, pero de todas formas no hubiera entrado ya que es un poco cara y yo ya no podía gastar un peso de mas. Desde el mirador que había allí se podía disfrutar de una vista panorámica de todo Bariloche y alrededores, pero no permanecí allí por mucho tiempo porque el viento y el frió me estaban castigando, y por lo que se veía, en cualquier momento se largaba a llover. Mientras volvía agarré velocidades muy altas gracias a la bajada y al viento a favor, de hecho, tenia que controlar la velocidad porque sino me iba a matar. Cuando estaba cerca de llegar al hostel comenzó a llover, así que aceleré todo lo que pude para llegar lo antes posible y no mojarme tanto. Me bañe, cené y me fui a dormir.

Mientras desayunaba al otro día, pude ver por la ventana del hostel que las puntas de las montañas al otro lago del lago, a diferencia del día anterior, estaban nevadas. La tormenta del día anterior las había dejado así. Era una vista bastante linda la verdad. Cuando terminé de comer, armé la bicicleta devuelta y me fui para la terminal, mi micro salía a las 13:00 pero yo quería ir con tiempo ya que tenia que embalar la bicicleta y no se cuanto tiempo me llevaría eso. Una vez en la terminal volví a desarmar la bicicleta y me corté el dedo meñique con el plato mientras sacaba uno de los pedales. El corte parecía bastante feo así que saque el botiquín de primeros auxilios que llevaba, me limpié la herida con agua oxigenada y me vendé con gaza. Una vez desarmada la bici, solo faltaba embalarla, para ello seguí el consejo que me dio Marcelo y compré un rollo de papel film de cocina y cinta de embalar. Eso sumado a un par de cartones que saqué de un container me permitieron embalar perfectamente la bicicleta. De hecho, nunca había estado mejor embalada.

Una vez llegado el micro, surgió un problema: no me dejaban subir la bicicleta porque era exceso de equipaje. El muchacho me dijo que debía pagar 50 pesos por exceso de equipaje en la oficina de la empresa o enviar la bicicleta por encomienda. Pero yo solo tenia 19 pesos en el bolsillo y no tenia tiempo para enviar la bici por encomienda porque el micro ya se iba. Estaba en un verdadero aprieto, así que le pregunte al muchacho si me dejaba subir la bici igual si yo le daba 19 pesos a el. Se negó argumentando que eso lo comprometía a el, pero me dijo que hable con el inspector que estaba allí a tan solo unos metros hablando con el chofer. Le expliqué mi situación y accedió a dejarme subir la bicicleta si yo le "tiraba unos mangos" al muchacho, así que le di los 19 pesos, cargue la bici y subí al micro ¡Que alivio!

Y así terminó mi viaje, sentado en aquel micro de vuelta a Buenos Aires. Muchas cosas me pasaban por la cabeza: los perros ladrones, la perdida de la bolsa de dormir, los rayos cayendo en el camino, el encuentro con la vaca nocturna del mal, el misterioso refugio abandonado, el pan casero de la vida y su posterior pérdida, Malargüe, la serpiente que casi piso, Buta Billon y su gente, la noche en el vestuario del polideportivo, Gaston, el choique, la cabaña en Pino Hachado, la familia de Cutral-Co que me invitó a comer asado, la noche en el bosque de araucarias, Maru y Sofi con sus fideos al dente, la subida de la muerte, los mochileros chilenos, la lluvia, Fransisco y Gaston, Marcelo, los arrayanes, y mucho mas. Todas estas situaciones habían hecho que el viaje sea una experiencia única que definitivamente me marcaría de por vida, y las recordaba con una sonrisa nostálgica. Estaba feliz y en paz, supongo que eso es lo que se siente tras haber cumplido un sueño. Pero había algo que predominaba en mi cabeza, algo que dejaba en segundo plano a todo lo demás, una pregunta que no podía dejar de hacerme...

¿Por donde va a ser mi próximo viaje en bicicleta?

24 comentarios:

  1. Loco, buenisimo el viaje, me lo lei todo! Estoy pensando en hacer mi primer viaje, bastante mas corto igual porque no tengo idea de viajes en bici, pero ando con ganas, y esto me entusiasmó más. Pensaba hacer Bariloche a Esquel como para ver que onda. Bueno, felicitaciones y segui viajando , un abrazo.

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  2. ¡Me alegro que este blog te haya entusiasmado mas Joa! No dudes en realizar tu viaje, definitivamente es una experiencia única ¡Espero que te vaya bien! ¡Saludos!

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    1. Te felicito por el viaje la verdad debe haber estado muy bueno. Entre todo lo que leì rescate algo muy bueno, decirle no a un porro xq queres mantener tus pulmones libre de humo. Te felicito loco! DIOS TE BENDIGA!

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  3. Que buen viaje flaco!!! lo lei de punta a punta porque estamos planeando un viaje laaaaaargo en bici, y estoy viendo y leyendo paginas y blogs al respecto. El tuyo esta muy lindo, y se agradecen los consejos y experiencias vividas.
    Espero que el proximo viaje hagas otro diario como este y quien te dice, por ahi nos cruzamos en las rutas.
    Un abrazo.
    Victor.

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  4. ¡Gracias victor! Que bueno que te haya gustado el blog. Espero que tengan un buen viaje lleno de aventura. No dudes en compartir la experiencia despues :P. Saludos y buen viaje!

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  5. Pablo! Felicitaciones por el viajecito que pegaste!! Soy de Mendoza y estaba planeando ir el mes que viene al sur (camino de los 7 lagos). Ya he ido de mochilero (al norte) y esta vez queria ir en bici! Agradeceria si te contactas conmigo para poder intercambiar info y opiniones, me seria de mucha ayuda!! Gracias y Saludos

    PD: fb /AlexanderAznar

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    1. Gracias che! Ahí te agregué a fb así hablamos de la ruta, saludos!!

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  6. Bueno! la verdad que cuando empece a leer tu relato, tu diario de viaje, me dije que me parecia muy de egocentrico escribir este tipo de diarios. pero la verdad que despues de leerlo de punta a punta. esta buenisimo, te felicito por el viaje, por todo lo que transmitiste en el diario y por lo que nos inspiras a cada uno de los que quieren hacer un viaje asi. Yo recien hace 2 dias retire la bici armada de la bicicleteria. tenia una vieja de ruta y ahora me estoy armando una mtb. digo que estoy armando porque ahora tengo un cuadro y horquilla viejo. pero todo lo demas bastante bueno. y la idea es juntar $ para seguir armandola a mi gusto, y tengo ganas de a poco ir haciendo viajecitos medios largos. y algun dia hacer un viaje como el que hiciste! te felicito! y gracias!

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    1. Gracias Enrique! Espero que pronto termines de armar tu bici así podes salir a las rutas! La verdad que yo recomiendo mucho escribir diarios de este tipo de viajes, mas que nada porque cuando pasan los años y vos mismo lees lo que escribiste, revivis las experiencias, las sensaciones, etc... y eso está buenisimo! Saludos!!

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  7. loco me encanto este diario de viaje!! llegue a el invistigando viajes en bici porque justamente tenia la idea de hacer uno, y no pude caer en mejor lugar ya que soy de Mendoza y mi plan es llegar a Bariloche, exactamente la misma ruta, con algunas variantes pero casi igual! no te imaginas como me motivo tu relato.
    un gra saludo, segui viajando y escribiendo, espero el proximo diario!

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    1. Buenísimo! Te espera un viaje zarpado porque la verdad es hermosa esa zona. Cualquier duda que tengas sobre la ruta, lugares para parar, etc. no dudes en consultarme. Saludos!!

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  8. Te re-felicito por la aventura que viviste. Yo sólo hice viajes cortos y estoy esperando mi jubilación como docente para hacer el mismo recorrido (soy de Entre Ríos). Te juro que me alentaste muchísimo y me diste excelentes datos. Un abrazo

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    1. ¡Muchas gracias Daniel, me alegro haberte alentado con mi relato! Ojala pronto puedas salir a vivir la aventura que propone la ruta 40, te aseguro que es inolvidable ¡Saludos!

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  9. Especatacular el viaje, la verdad que me lo lei de punta a punta en el trabajo, me queria meter en el relato y avisarte que te habias confundido de ruta pero que ibas a llegar a una Escuelita (La Jaula) donde es Director un primo mio, lastima que seguistes, tambien me rei mucho cuando esperabas llegar a Agua del Toro y comprar una Bolsa de Dormir, jajajaj ahi solo hay un barrio abandonado en los 80 que solo se construyo para el personal que hizo el Dique, lo que si hay es un puesto de Gendarmeria en donde hubieras pasado la noche o por ahi te hubieran abierto alguna casa para dormir, frecuento la zona para ir a pescar. Espero que ya tengas planeado otro viajecito... Saludos

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  10. Que idolo,y que huevasos man, te felicito y muchas gracias por compartir tu historia, algún día lo voy a hacer también !

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  11. Excelente viaje y relato Pablo. Te felicitó por la aventura y por animarte a compartir tus anécdotas y experiencias con todos.
    Llegue al blog buscando viajes en bicicleta ya que estoy viendo la posibilidad de hacer un mega viaje largo pero por Europa. Cada historia que leo me dan más ganas, me motiva, se fortalece la idea y me hace sentir más seguro de lo que planeó hacer.
    Un groso, ojalá tengas muchos viajes más!
    Un abrazo!

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  12. Excelente viaje y relato Pablo. Te felicitó por la aventura y por animarte a compartir tus anécdotas y experiencias con todos.
    Llegue al blog buscando viajes en bicicleta ya que estoy viendo la posibilidad de hacer un mega viaje largo pero por Europa. Cada historia que leo me dan más ganas, me motiva, se fortalece la idea y me hace sentir más seguro de lo que planeó hacer.
    Un groso, ojalá tengas muchos viajes más!
    Un abrazo!

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    1. ¡Gracias Pani! ¡Quiero leer el relato de tu viaje cuando lo hagas eh! Te aseguro que escribir un diario del viaje es la mejor decisión que podes tomar... por que cuando pasan los años y te vas olvidando de los detalles... están ahí escritos para que los revivas cuantas veces quieras.
      ¡¡Saludos y suerte!!

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  13. Muy bueno el relato! estuve atrapado leyendolo dos dias sentado en la oficina del laburo e imaginando esos lugares, soy de Mendoza y en el año 98 hice el camino de los 7 lagos en bici y con alforjas con amigos, el mejor viaje que he hecho. Gracias por compartir tu história. Te has vuelto a ir a algún lado?. Saludos

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    1. ¡Gracias, me alegro que te haya gustado el relato! La verdad que los 7 lagos es un lugar hermoso para recorrer, sobre todo el bici. Lamentablemente no volví a hacer otro viaje en bici, tengo MUCHAS ganas igual... me gustaría conocer el norte en bici por ejemplo. Pero bueno, ya se dará la oportunidad de hacer otro, y cuando lo haga voy a volver a escribir un diario :P
      ¡Saludos!

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    2. Hola Pablo, Gracias por la respuesta, te estuve buscando en face, pero hay varios Pablo Miceli, como hago para ubicarte? soy Dario Castellvi Castellani. Saludos

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  14. Excelente Pablo, me tuviste atrapado 4 días, me lo leí de punta a punta. Los paisajes, las fotos, las anecdotas, tu sinceridad y transparencia hacen un relato memorable. Espero pronto vuelvas a hacer otro viaje.
    Saludos y gracias por compartirlo.

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    1. ¡Gracias Ariel, me alegro que te haya entretenido! Yo también espero hacer otro viaje de estos pronto jej.

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